Sistemas eléctricos de calefacción por acumulación eléctrica de calor
Como es sabido, la energía eléctrica es difícilmente acumulable. Es por esto que las centrales eléctricas se encuentran con una disyuntiva en las horas en las que la energía no es tan necesaria (por la noche), para seguir manteniendo encendidas las centrales, sobre todo las térmicas. Los sistemas eléctricos de calefacción por acumuladores sean una opción buena para las compañías eléctricas y también para el usuario.
Una de las soluciones es incentivar el consumo de energía en estas horas y, para ello, las compañías eléctricas ofrecen tarifas mucho más bajas para el consumo en estas horas bajas (hasta un 50% menos en el precio habitual).
La calefacción por el método de la acumulación es el mejor ejemplo. La energía térmica se acumula durante un período de entre 8 y 14 horas (horas bajas), lo que supone un gran ahorro para el usuario y produce toda la energía necesaria para que el calor se mantenga durante todo el día.
Por otro lado, es muy importante calcular correctamente las necesidades de calor que necesitaremos durante el día, ya que, solo se puede acumular durante un período concreto de tiempo. Hay que tener en cuenta las dimensiones del espacio que queremos calentar y sus condiciones, como si disponen o no de aislamiento, o la capacidad del habitáculo para mantener la temperatura que se descarga, para poder estudiar el sistema mejor que nos hace falta en cada caso.
Un inconveniente de los sistemas eléctricos de calefacción es que la carga de energía térmica se realiza con anterioridad al uso que va a aportar y, por tanto, habría que predecir nuestras necesidades con antelación, teniendo en cuenta, por ejemplo, la temperatura que habrá al día siguiente en el exterior. Es decir, el parte meteorológico.
Otro inconveniente es el que se presenta en determinadas épocas del año en que no es necesario obtener la misma temperatura durante todas las horas del día. Esto se da en otoño y primavera, cuando todavía hace frío por las mañanas pero no así al mediodía o o por las tardes. En estos casos, produce un sobre calentamiento del habitáculo que puede no ser adecuado.
No obstante, existen algunos sistemas eléctricos de calefacción que controlan la carga y que prevén la necesidad de energía que se va a necesitar en función de la temperatura que haga en el exterior.
La ventaja de la calefacción eléctrica por acumulación, además del ahorro económico, es que su mantenimiento es muy bajo. Solamente necesita una limpieza anual de los aparatos acumuladores y renovar las pilas de los cronotermostatos.
A continuación relacionamos algunas de las ventajas e inconvenientes de la calefacción eléctrica por acumulación:
Ventajas:
- El coste es reducido, ya que se aplican las tarifas nocturnas, lo que supone un buen ahorro económico.
- Su instalación es fácil y no necesita obras.
- Es un sistema limpio y seguro basado en energía eléctrica.
Inconvenientes:
- La reforma de las tarifas eléctricas, hace que el consumo en las horas punta se penalice con un incremento en el coste del 35% con respecto a la tarifa normal.
- En función del tipo de acumulador, quizá tengamos menos control sobre la descarga de calor que deseamos.
- El precio de cada aparato acumulador puede ser elevado.
- La instalación eléctrica en casas más viejas precisa bastante reforma.